Una trama con mucha acción, disparos vienen y van. Unas mentiritas y malos entendidos harán las cosas complejas, interesantes y algunas veces absurdas. Digamos que es una novela con un poco de locura.
El drama como siempre presente y la intriga estará servida en bandeja de plata. Una historia romántica en la que nada es lo que parece.
Raychel es la ilustradora estrella en la empresa de Denley Lambert. Ella lo adora y lo ama en silencio, a la distancia. Hasta que un día lo improbable sucede y ella despierta de su ensoñación y ve que solo ha amado una fantasía que armo en su mente.
Entre su dolor emocional y el físico, su vida da un vuelco al llegar su madre por ella y destapar una bomba en la empresa. Denley no puede salir de su estupor, al ver a Raychel con otros ojos.
Denley es un hombre de trabajo, inteligente y atractivo. Le va muy bien con las mujeres, hasta que se topa con su ilustradora y ahora que sabe su realidad no dejara de tratar de conquistar su amor. Sí, sabe que será algo solo para valientes. Porque detrás de ella hay una familia de armas tomar.
Un final esperable, que a mí en lo particular no me gusto y el epílogo que debió ser más largo o explicativo, digamos que se quedó corta la autora con este. Por lo demás fue una historia bastante buena. Con mucha emoción y sentimientos, claro, con bastante sangre e idas al hospital, pero por lo demás es un romance a prueba de balas.
Nos estamos leyendo en mi siguiente lectura.
Por HS
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Sinopsis:
¿Quién no ha tenido alguna vez un ídolo? Un cantante de rock o un actor de cine que nos hace suspirar. Para Raychel Tarner, una chica aparentemente normal, es su maravilloso, atractivo e inteligente jefe. Así que fue un verdadero chasco descubrir que Denley tenía los pies de barro. ¿Qué debía hacer ahora? Era una pena que la madre de Raychel tomara cartas en el asunto...
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